Para meditar (ou non)




LA LECTURA NO ES UN LUGAR COMÚN:
CÓMO ESCAPAR DE LA INSOLENCIA CRÍTICA
 
Es inaudita la cantidad de metáforas que, a lo largo del tiempo, han prosperado en torno al acontecimiento de la lectura. Vemos cómo sin un parpadeo se la compara con una aventura, una conversación con los muertos —ahí es nada—, un viaje fabuloso, una casa confortable o tétrica, una ventana abierta al mundo, una llave capaz de desvelar los misterios más insondables... Por otra parte, su defensa se ha sustentado también en una colección soporífera de afirmaciones tan falsas como contundentes: «Quien no lee no piensa», «Quien no lee no puede ser libre», «Quien no lee no alcanza a comprender el mundo», «Quien no lee lleva una vida triste»...
Y es así como se ha ido conformando una deplorable mitificación del acto de leer. De hecho, sospechamos que cuantas más metáforas se utilicen para hablar de la lectura, menos se dirá de ella. ¿Queremos decir con ello que el discurso elaborado sobre la lectura durante estas décadas constituye un inmenso mar de palabras en un desierto de ideas? Sin duda, pero no sólo. Víctor Moreno

«Muere lentamente quien no viaja, quien no lee, / quien no oye música, / quien no encuentra gracia en sí mismo. / Muere lentamente / quien destruye su amor propio, / quien no se deja ayudar...».  Martha Medeiros.



 
"El tiempo es el mejor escritor: siempre da con el final perfecto."
Charlot en Candilejas.






Quizá la medida de la lectura no debe ser el número de libros leídos, sino el estado en que nos dejan. ¿Qué demonios importa si uno es culto, está al día o ha leído todos los libros? Lo que importa es cómo se anda, cómo se ve, cómo se actúa, después de leer. Si la calle y las nubes y la existencia de los otros tienen algo que decirnos. Si leer nos hace, físicamente, más reales. Gabriel Zaid






"Estar a solas con un buen libro es ser capaz de comprenderte más a ti mismo."
Harold Bloom. 











"El libro que enseña y conmueve es además ahora el mensajero de nuestra voz
y la defensa para pensar en libertad."
José Luis Sanpedro (1917). Valor de la palabra.


 

«Sólo hay dos cosas que pueden cambiar realmente a un ser humano: un gran amor y la lectura de un gran libro»
(Paul Desalmand)












“El tiempo para leer es siempre tiempo robado. (De la misma manera que lo es el tiempo de escribir o el tiempo de amar)” 
 (Daniel Pennac)
(Como una novela. Bogotá: Norma, 1996)

 Ignat Bednarik

"Que otros se enorgullezcan de las páginas que escribieron; yo me siento orgulloso de las que leí."
(Jorge Luis Borges)

No hay comentarios:

Publicar un comentario